El defensor de Boca, Agustín Sández, fue víctima de la inseguridad. El lateral fue interceptado por delincuentes cuando llegaba a su casa del partido de Lanús. Los atacantes lo golpearon y le robaron su camioneta. Todo quedó grabado por una cámara de seguridad.
Luego de la derrota frente a Patronato en Paraná, el plantel de Boca regresó a Buenos Aires. Los futbolistas recogieron sus autos particulares y regresaron a sus hogares. En ese contexto, una de las promesas del Xeneize, Agustín Sandez, fue asaltado cuando llegaba a su domicilio.
“Me acaban de robar la camioneta y todas mis pertenencias. Si les llega algún mensaje, no soy yo”, describió el propio defensor en su cuenta de Instagram luego del violento episodio.
Además, cargó una impactante foto en la que se lo ve con el ojo lastimado reflejó la violencia con la que actuaron los delincuentes. “La inseguridad hoy nos tocó a nosotros. Le robaron a Agustín. Te roban la camioneta y te rompen la cabeza de un culatazo. Una locura”, explicó su pareja en la misma red social.
También se conocieron las imágenes del hecho, que muestran la brutalidad con la que los delincuentes le robaron la camioneta al jugador de Boca, después de emboscarlo y golpearlo.
En el video se puede ver que el futbolista llega y abre el portón de la casa de manera automática, y luego da marcha atrás para entrar. En ese momento, dos autos, un Toyota Corolla blanco y un Volkswagen Gol negro, que habían sido robado instantes antes a pocas cuadras, lo rodean y no le dejan más opción que bajarse.
Acto seguido, los delincuentes abordan a Sandez, lo golpean para que les dé las llaves de la camioneta, y luego huyen dejando abandonado uno de los vehículos con el que habían llegado.
El hecho ocurrió ayer cerca de la medianoche, en el cruce de las calles 2 de Mayo y Coronel Seguí, en Lanús Oeste.
Tras una alerta emitida por la Policía bonaerense a la Policía de la Ciudad, debido a que los sospechosos tras el asalto se dirigieron con sentido a Capital Federal, se montó un operativo, en el marco del cual la Toyota y la Amarok fueron divisados en el límite de ambas jurisdicciones.
Voceros de la fuerza porteña informaron que los rodados fueron vistos cuando circulaban a la altura de la calle Necochea y la avenida Suárez, en La Boca, por lo que se inició una persecución.
El primero de los vehículos, el Toyota Corolla, fue ubicado cuando lo dejaron estacionado en las calles Olavarría y Ministro Brin; mientras que la Amarok del futbolista fue recuperada tras una persecución que finalizó sobre el Puente Nicolás Avellaneda, donde el rodado chocó contra el guardarrail.
Tras los procedimientos, quedaron detenidos cuatro sospechosos, dos de ellos menores de edad, quienes fueron puestos a disposición de los tribunales de menores.
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