Un efectivo de la Policía de la Ciudad liquidó a un delincuente en Morón

Sucedió ayer por la tarde. Al uniformado lo emboscaron para sustraerle la moto, que entregó sin resistencia, pero en cuanto estuvo a resguardo, disparó contra el delincuente que ya estaba sobre el rodado. De momento, la Justicia no adoptó temperamento alguno para con el servidor público.

Otra vez un efectivo policial que se defiende de un robo y acaba con la vida de un rastrero. Fue ayer, minutos antes de las 18 horas, en el partido de Morón, más precisamente en Merlo y Munilla, en la zona de Castelar.

La víctima, un numerario de la División de Intervenciones Rápidas de la Policía de la Ciudad, estaba a bordo se su moto marca Honda cuando fue emboscada por una pareja de motochorros, que lo obligaron a detener su marcha. Para eso, de acuerdo se v en la filmación, realizaron dos disparos de arma de fuego.

Ante eso, el uniformado dejó caer su moto al piso, y se alejó, mientras uno de los rastreros le pedía que entregue también el casco. El delincuente se subió a la moto del policía y fue por más: Le pidió que entregue la mochila.

En ese momento, con el rastrero a bordo de la moto y a una distancia prudencial, el efectivo de la fuerza porteña no dudó y disparó en 6 oportunidades contra él. El malviviente cayó al suelo al instante, herido por los balazos que salieron del arma reglamentaria de la víctima y que impactaron en su cabeza y en el tórax. Su cómplice, cobarde, huyó.

Fueron los vecinos, que salieron a la calle alertados por las detonaciones, los que llamaron al 911. Así, llegaron al lugar del hecho elementos de la Policía bonaerense y personal del SAME, que trasladó al ladrón al Hospital Posadas, donde murió mientras era intervenido quirúrgicamente.

Fue identificado como Matías Aguirre, de 22 años. Tenía domicilio en Isidro Casanova, partido de La Matanza.

La causa quedó en manos del fiscal Matías Rapazzo, de la Unidad funcional de Instrucción 7, que por el momento no adoptó temperamento alguno para con el policía de la Ciudad, ya que consideró que actuó en legítima defensa.

Continúa la investigación para dar con el malviviente que escapó, y no se descarta la posibilidad que, en el marco de la causa, se evalúe si hubo un exceso de la legítima defensa en el accionar del uniformado.

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