Ese es el calificativo que le cabe al jubilado que conducía borracho y al que costó realizarle el test de alcoholemia que certificó su estado. “Si fuera intendente no te contrato porque sos gay”, lanzó además el rancio sujeto, que también amenazó al trabajador con “hacerlo carne picada”. Manejaba con 1,35 gramos de alcohol por litro de sangre.
Un repudiable hecho tuvo lugar en la ciudad de La Plata, a metros de la Casa de Gobierno provincial. Allí, un adulto mayor visiblemente borracho fue sometido a un control de alcoholemia y respondió, no solo con violencia, sino que recurrió a agresiones de características homofóbica.
Todo comenzó cuando los agentes de tránsito del Municipio de La Plata frenaron al rancio sujeto para realizarle el test. En primera instancia, el jubilado se negó, pero luego cedió ante las recomendaciones de los agentes y la presencia policial.
A partir de ese momento comenzaron las agresiones para con el trabajador. «No me gusta tu actitud, porque sos gay. Te mataría”, lanzó el borracho. Cabe destacar la calma y el respeto con la que se manejó el municipal platense, ante las barbaridades que manifestaba el individuo.
Durante la secuencia, que duró poco menos de 3 minutos, hubo momentos que rozaron la violencia física, que se dieron cuando el rancio individuo debía colocar la pipeta en el dosímetro, acción que realizó con suma agresividad. Un policía debió intervenir para calmarlo, y ante la presencia del uniformado, el cobarde cedió.
«Un gay que me haga esto… Si fuera intendente no te contrato porque sos gay. Te vas a morir de hambre conmigo», lanzó el homofóbico vecino, que fue por más, ya que amenazó al agente de tránsito con “hacerlo carne picada”.
El test de alcoholemia arrojó como resultado 1,35 gramos de alcohol por litro de sangre, por lo que se llevó a cabo la retención del vehículo y de la licencia del conducir del adulto mayor adepto al trago. Además, quedó demorado por sus agresiones.
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